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Foto: diputados.gov.ar
En una sesión marcada por la represión contra manifestantes en las inmediaciones del Congreso, la Cámara de Diputados ratificó esta tarde el veto del presidente Javier Milei a la ley de movilidad jubilatoria impulsada por la oposición, que buscaba mejorar los haberes previsionales.
El apoyo a la mejora jubilatoria perdió siete votos respecto a la votación de junio, en parte debido a la decisión de cinco diputados radicales de cambiar su postura, y a que los legisladores de Innovación Federal, que antes apoyaban la reforma, optaron esta vez por abstenerse. En contraste, el bloque que respaldó el veto creció en 15 votos, alcanzando los 87 necesarios para bloquear la reforma. El oficialismo necesitaba solo 83 votos para superar el tercio y asegurar el veto, logrando cuatro votos de más.
Los cinco diputados radicales (Martín Arjol, Luis Picat, Mariano Campero, Pablo Cervi, y Federico Tournier) cambiaron su posicionamiento tras reunirse con Milei en la Casa Rosada, votaron a favor del veto presidencial.
El PRO se consolidó como un aliado clave del oficialismo en esta votación, con 34 de sus 38 diputados votando contra la ley. Álvaro González, del sector larretista, se desmarcó votando a favor de la reforma, mientras que tres diputados del PRO (Héctor Baldassi, Ana Clara Romero, y Héctor Stefani) estuvieron ausentes para no tener que votar en contra de los aumentos para los jubilados.
Además, el Gobierno contó con el respaldo del bloque del MID de Oscar Zago, el bloque tucumano Independencia, las dos diputadas de Buenos Aires Libre, los sanjuaninos de Producción y Trabajo, y la tucumana Paula Omodeo del monobloque Creo. Entre las abstenciones, se registraron Lourdes Arrieta (FE), expulsada de La Libertad Avanza, y siete diputados de Innovación Federal.
La confirmación del veto presidencial desencadenó protestas en las cercanías del Congreso. Jubilados y organizaciones políticas que se manifestaban en contra de la decisión fueron reprimidos por la Policía Federal con gases lacrimógenos tras derribar las vallas de seguridad que rodeaban el área.
La ley de reforma jubilatoria vetada por Milei proponía un incremento del 8,1% en los haberes para compensar la pérdida inflacionaria de enero, un nuevo piso de jubilaciones mínimas, y un aumento adicional cada marzo, ajustado por la variación salarial.
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